jueves, 11 de octubre de 2012

Hotel Louis Leger : Muy mala experiencia en Praga.

Supongo que es lógico que en todo viaje largo haya experiencias más o menos agradables, por pura estadística, y a mi una de las noches de Praga me tocó una experiencia especialmente mala. Tenía una habitación individual en el Louis Leger, un hotel de 4* aparentemente normal. Todo parecía muy correcto, hasta que al volver al hotel de noche me pasó algo bastante desagradable.

Llegué al hotel a eso de las 12:30 tras tomar algo con unos amigos, y al pedir la llave, el recepcionista me preguntó qué tal, y me dijo que si quería tomar algo. Le dije que no amablemente, y me subí a la habitación. Tonta de mi, se me olvidó pasar la llave por la puerta, porque la verdad es que no lo pensé mucho. Me quedaba bastante por hacer antes de dormir, pero decidí tirarme un ratito en la cama antes de ponerme con la maleta.

Estaba yo boca abajo tirada, en ropa interior, con la cabeza hacia el lado opuesto de la puerta, cuando noté algo raro. Me giré, y me encontré ni más ni menos que con el recepcionista, que había entrado a escondidas, intentando meterme mano. Me dio el susto de mi vida, y empecé a gritarle que se fuera como una loca, mientras él intentaba insistir en quedarse. Increíble. Afortunadamente se acabó marchando, pero no os imagináis el mal cuerpo que me dejó la situación.

Supongo que debería haber hecho algo al respecto esa misma noche, pero estaba muy nerviosa, sabía que en el hotel estaba solo él, y no sabía muy bien cómo actuar, así que aunque me costó bastante, conseguí quedarme dormida, y decidí qejarme al día siguiente.

Por la mañana, en cuanto me desperté bajé a recepción a hablar con el responsable. El susodicho aún estaba ahí, lo que me dio bastante mal rollo, pero bueno, conté todo lo que había pasado, mientras el responsable en cuestión me miraba con cara de susto, y en general de "no me estoy creyendo nada". Yo estaba empezando a alucinar y a sentirme mu impotente, porque no sé muy bien qué motivos podian llevarme a inventarme algo así, y habia sido realmente desagradable, así que llamé a mi amigo checo porque ya no sabía que hacer.

Cuando vino, habló él otra vez con el responsable, vino otro amigo suyo también, pero al parecer el pervertido en cuestión "era un buen chico" y "nunca había dado problemas". Estaba siendo todo tan desesperante que acabamos llamando a la policía porque en el hotel al parecer no se podía siquiera poner una queja oficial. Llegaron, llamaron al chico, que se había ido, nos onterrogaron a ambos , miraron las cámaras de seguridad (inútiles, porque no había en los pisos, así que no se podía ver nada) y un auténtico lío todo.

La verdad es que al final no pasó nada, y podría haber sido mucho peor si él no se hubiera ido cuando me puse a gritar, pero debo decir que entre el hecho en sí, la impotencia del día siguiente, y todo....fue en conjunto una experiencia muy desagradable. Me parece importante al menos contar esto, y que este tipo de conductas se den a conocer, porque el callárselas "porque no pasó nada" solo propicia que puedan volver a ocurrir.

Así que no sé, si yo fuese vosotros y estuviese eligiendo hotel para Praga...no sé si elegiría ese.

1 comentario:

  1. Que fuerteee Ari,me alegro de que estés bien,en serio,no doy crédito,hay mucho jodido de la cabeza suelto,que mal trago pequeña tuvo que ser una sensación de impotencia e inseguridad bestial,encima lejos de casa y sola que te suceda algo así! pero bueno estás bien,que es lo que importa! Y sí importante es hacer saber esta clase de cosas,hecho aislado queremos pensar....

    Dinos que Praga fue bonita a pesar de esa experiencia CORAZÓN! Un besazo.

    ResponderEliminar